Unidad y lucha social contra la derecha y su plan de hambre para el pueblo

EEUU el país imperial, tiene enormes problemas sanitarios y económicos, que son más notorios tras la pandemia. Miles de infectados, internados y casi 80 mil muertos, ponen en evidencia ante la humanidad las debilidades e injusticias, intrínsecas en el seno de su esencia.

La verborragia de los líderes de EEUU no tiene límites, como sus atrocidades y grandes mentiras. Sus ataques a China por mercados, precios, aranceles es conocida, ahora se agrega la búsqueda del causante de la propagación del corona virus.

Trump y su gente deben explicar cuánto se hizo y desde cuándo, a través del riñón del poder imperial para acudir rápidos y decididos a frenar el virus que enfermó, mató a tantos ciudadanos norteamericanos y dio paso al resquebrajamiento agudo de la economía yanqui sembrando más hambre y pobres a los millones que ya tenían y ocultaban, con gran desfachatez.

El Frente Amplio, dejó números en rojo en varios rubros de la economía y en la sociedad uruguaya. Es fácil entender a los grandes medios de comunicación de los organismos financieros internacionales, que tanto felicitaban a Astori y su equipo, que con el apoyo de T. Vazquez y J. Mujica como presidentes, hicieron más ricos a los ricos y más pobres a trabajadores, jubilados y pueblo en general.

Durante marzo, mes en que se desató la pandemia el COVID-19, el BPS registró un incremento notorio en la cantidad de solicitudes de empresas para que trabajadores pasen a cobrar el subsidio por desempleo o seguro de paro -por despido, o cese total o parcial de tareas. Lo concreto es que el BPS pasó de pagar 45.937 subsidios en febrero a abonar 109.449, un incremento exponencial, que demuestra la difícil situación que atraviesan miles y miles de familias.

Los despedidos, suspendidos, en el seguro de paro o en negro, seguirán golpeando a nuestro pueblo y en su normalidad el gobierno espera al malla oro para que genere empleo.

Economistas de cierto renombre y altos gobernantes del mundo aconsejan pagar menos deuda e intereses, fortalecer al Estado, sin embargo el anterior gobierno FA y los actuales gobernantes impulsan al capital privado en las empresas públicas, también en salud y educación. La deuda uruguaya es enorme, pesa brutalmente sobre las espaldas de trabajadores, jubilados, de los que no tienen casa, etc.

En estos tiempos de quedate en casa, algo aconsejable según los más expertos del tema a nivel mundial, el nuevo presidente y su equipo, parece fortalecerse desde los medios y apura el paso con la Ley de Urgente Consideración, demostrando palmariamente que se vendrá más censura, represión, restricciones sindicales y sociales. Hay medidas impostergables, urgentes, que implican un rumbo a favor de la soberanía del país, de la industria nacional y de nuestro pueblo para comenzar a transitar un camino de independencia ante los intereses de las multinacionales.

La confluencia de fuerzas políticas y sociales que de forma honesta tengan voluntad de lucha y transformación verdadera de esta realidad por una patria donde nadie muera de hambre, de frio, por no tener acceso a un tratamiento médico, o por ser víctima de la violencia social, por una sociedad donde nadie viva a costa del trabajo de otro.