Para no olvidar: A 75 años de la capitulación de la Alemania nazi

Kombat es una de las fotografías de guerra más famosas. Fue hecha por el corresponsal de la APN Max Alpert el 12 de julio de 1942 en el pueblo de Jorósheye, región de Lugansk.

La noche del 8 de mayo de 1945 en Karlshorst, un suburbio de Berlín, fue firmada el acta de capitulación alemana que puso fin a la Gran Guerra Patria, el enfrentamiento entre 1941 y 1945 contra la Alemania nazi durante la Segunda Guerra Mundial.

El acta entró en vigor a las 23:01 cuando en Moscú ya era el 9 de mayo. Por eso, el Día de la Victoria en Europa y Rusia se celebra con un día de diferencia.

Los documentos de rendición fueron firmados por los jefes nazis de la Armada, de la Infantería y de la fuerza aérea (Luftwaffe): el mariscal Wilhelm Keitel, el almirante Hans-Georg von Friedeburg y el general Hans-Jurgen Stumpff. El mariscal soviético Gueorgui Zhúkov y el subcomandante supremo de las Fuerzas aliados Arthur Tedder firmaron el documento aceptando la rendición.

El acta establecía un alto del fuego en los frentes de la Segunda Guerra Mundial contra Alemania, obligando a las fuerzas armadas alemanas a cesar las hostilidades y a desarmarse para evitar la destrucción o el daño del equipo militar, marcando la retirada de Alemania de la guerra.

La mujer soviética en la gran Guerra

Al menos 800.000 mujeres se convirtieron en pilotos, artilleras antiaéreas, ametralladoras, exploradoras, francotiradoras, enfermeras e instructoras sanitarias.

Lucharon heroicamente en el frente y en los destacamentos partisanos, trabajaron desinteresadamente en la retaguardia como enfermeras, fueron temidas aviadoras... las mujeres de la URSS hicieron lo posible y lo imposible durante la guerra para traer la victoria a casa.

En la foto que sigue, instructora sanitaria Valentina Gribkova se lleva a un herido del campo de batalla.