La columna pagana El Carnaval de los “Locos Bajitos”

Esta actividad comenzó en el año 1988, creándose la Asociación de Directores (ADICAPRO), impulsada por una categoría que no tenemos en carnaval Mayor: Escuelas de Samba, y desde las barriadas más populares de Montevideo. El espectro que abarca son niños y jóvenes entre 5 y 18 años. Su organización se apoya mucho en las familias, vecinos y el “barrio”, ya que comienzan su trabajo en abril y lo culminan en enero; brindando un espacio de actividades que va más allá de la preparación de un espectáculo. Inicialmente, dichas actividades eran gratuitas. Con el devenir del tiempo y la evolución de los espectáculos que presentan, la mayoría de los niños abonan una cuota mensual así como se paga a técnicos más profesionales en busca de mejores espectáculos. También debemos resaltar que en algunos casos son técnicos honorarios, ex promesas, salidos de los conjuntos y cumplida la edad, continúan aportando. Estamos hablando de un espacio que congrega a más de 1.000 niños y adolescentes, sin tomar en cuenta todo lo que mueve entorno. Muchos de esos niños, nutridos del arte, la autogestión y las enseñanzas de este espacio, hoy triunfan en distintas áreas, no solo del carnaval mayor, sino como cantantes, bailarines, actores, técnicos de sonido, vestuaristas, etc. De ahí el nombre de “promesas”, aunque su carnaval, sus espectáculos son muy de su “presente”, en cierto sentido, cumpliendo lo prometido. El mayor obstáculo quizás es la poca difusión con la que cuentan. Los grandes medios lo ignoran, aunque últimamente se pueden escuchar pequeñas menciones sobre el suceso. Varios jóvenes trasmiten con emprendimiento de radios on line, con el avance de la tecnología. Serían una buena alternativa de programación para el canal oficial o de la IM. La calidad de los espectáculos muchas veces podría estar en la programación del carnaval Mayor, por lo menos en tablados de febrero o carpas instaladas por los barrios a esos fines. Recordemos que se preparan muchos meses para actuar en el Teatro dos veces solamente. El Concurso cuenta con dos rondas, contando con una prueba evaluatoria en el mes de octubre, que no elimina ningún conjunto (no hay cupos predeterminados) sino que sirve para una devolución que el jurado realiza a fin de resaltar lo bueno y apuntar a corregir lo malo del espectáculo hasta ese momento. El desfile inaugural ya se realizó, con un recorrido acotado y que solo lo vieron los amigos y familiares que se acercaron, o algún curioso llamado por un corte de tránsito en 18 de julio. El 19 comienza el concurso oficial que este año se denomina Walter García, director de un laureado conjunto de parodistas Los Gummys, muchos años presidente de ADICAPRO (asociación de directores). Desde hace años, los nombres adjudicados son a personas que puedan disfrutar ese homenaje en vida. El concurso consta de dos ruedas, interrumpidas por las fiestas tradicionales. Comenzará el próximo 19 con 10 etapas hasta el 30 de diciembre, en el Teatro de Verano Ramón Collazo. Intervienen 40 conjuntos (murgas, humoristas, parodistas, revistas y sociedad de negros y lubolos), integrados por niños, niñas y adolescentes de entre 5 y 18 años. Serán 10 etapas en primera rueda y segunda rueda respectivamente, todos los grupos participarán de ambas ruedas. Cada etapa comenzara a las 20:30 horas, participando 4 conjuntos por noche. Las localidades se venderán mismo en boleterías del Teatro de Verano, a un costo de $200. Los integrantes de los conjuntos participantes tienen entrada libre, y los ex integrantes de promesas que tengan el carnet correspondiente, abonaran $100.