Opinión: ¿Que trae el gobierno de la derecha tradicional y la ultraderecha?
- La Juventud Diario
- 10 dic 2019
- 4 Min. de lectura

Más ajuste para que la crisis la pague el pueblo, más entrega al imperialismo y más represión a los de abajo.
Ricardo Cohen (Editorial La Verdad – Parte 2)
Atrás de discursos edulcorados y las selfies del presidente electo viene un ajustazo que se plantea reducir el déficit fiscal de alrededor del 5% que dejaron los gobiernos seudoprogresistas y proimperialistas del FA. Déficit que no se volcó al desarrollo de la industria y la producción nacional, ni a la creación de puestos de trabajo estables y con salarios dignos, a la salud, vivienda y educación popular, sino al pago de la usuraria e ilegítima deuda externa y a financiar las exenciones impositivas a las inversiones de los monopolios y el capital financiero internacional. El ajustazo que se viene no se plantea la reducción del déficit con impuestos al gran capital y eliminación de las exenciones mencionadas, sino nada menos que un “ahorro” anual de 900 millones de dólares por año del presupuesto nacional, que pasará seguramente por eliminar puestos de trabajo y bajar los salarios en el sector público, sea en forma directa o a través de mayores tercerizaciones y más privatizaciones en las empresas públicas en beneficio de los monopolios. La polémica que ha surgido en la transición en torno a cuándo ajustar las tarifas públicas y los combustibles, revela que el cuento de bajar las tarifas era eso, un cuento, ya que el propio presidente electo le pide al gobierno actual ajustarlas en enero y por inflación, ni siquiera se lo plantea por costos reales, o sea un nuevo tarifazo para recaudar, y que la rebaja prometida sucedería “después de ordenar los números”, al mejor estilo Macri, supuestamente el otro año o el año verde. Al escribir esta nota no se conoce el tan mentado proyecto de Ley de Urgente Consideración, un PAQUETAZO al estilo del rechazado por las rebeliones populares en el continente e incluso en Francia en estos días, que viene con reformas reaccionarias de la seguridad social y la legislación laboral. Ya se confirmó que plantearán la eliminación del decreto que autoriza las ocupaciones en el sector privado, que es toda una señal de mano dura contra la lucha de la clase obrera. Los primeros días luego del balotaje, cuando los periodistas le preguntaban a los voceros del gobierno electo acerca de este proyecto de ley con 400 artículos, lo único que contestaban era sobre las medidas represivas contra “la delincuencia”, léase contra quienes son jóvenes y marginados por esta sociedad, gatillo fácil, endurecimiento de las penas, y demás cantinelas archiconocidas del repertorio reaccionario, que encubren la explotación de la mayoría del pueblo por un puñado de grandes capitalistas y los delitos de cuello blanco inherentes al sistema capitalista-imperialista, corrupto por naturaleza. Han pasado dos semanas ya y es poco lo que han adelantado, la coalición de 5 partidos los complica, y por ahora se están repartiendo el botín de cargos. Por otro lado, con el clima de rebeliones populares en el continente, donde hasta Bolsonaro tuvo que parar parte de su paquetazo por miedo a la rebelión popular, no quieren adelantarle al pueblo las medidas reaccionarias que se plantean.
Los dirigentes oportunistas plantean “una oposición responsable” y aseguran “gobernabilidad”
Lejos de lo planteado en la campaña electoral sobre los peligros reales de un gobierno de la derecha, ahora la mayoría de los dirigentes del FA buscan acomodarse a la nueva situación, y se plantean una “oposición responsable” en la que en todo caso el nuevo gobierno haga el trabajo sucio del ajuste a fondo, tratar de mantener en mayo las intendencias de Montevideo y Canelones, e intentar volver al gobierno nacional en el 2025. Los dirigentes sindicales oportunistas de la mayoría de la dirección del Pit-Cnt, ya no hablan del “bloque social de los cambios” y mucho menos de movilizarlo combativamente como lo hacen los pueblos hermanos del continente. Van a seguir maniatando, desviando y dividiendo las luchas del movimiento obrero; para eso se ofrecen también al gobierno electo. En todo caso cuando se arrimen a las próximas elecciones, tratarán de conquistar incautos nuevamente con algunas luchas menores que puedan exhibir como méritos.
El camino es la organización clasista y la lucha combativa y lo más unificada posible
En las elecciones de octubre votamos a la 960 y la Unidad Popular, que integramos desde su fundación, y en el balotaje de noviembre junto a la mayoría de la clase obrera y el pueblo, votamos a Martínez, para tratar de evitar el gobierno de la derecha tradicional y la ultraderecha. Nuestro partido considera que la clase obrera en el Uruguay es la vanguardia y la fuerza motriz principal de la revolución, y que el centro de gravedad del trabajo de un partido del proletariado está en los sindicatos, en el Pit-Cnt, más allá de que el oportunismo sea mayoría en su dirección hoy, mayoría que hay que disputar desde adentro de cada sindicato, desde las agrupaciones clasistas, desde las que existen y de las que se deben crear donde no las hay. Ahí está el corazón de la lucha de masas en nuestro país, que hay que fortalecer para poder derrotar al oportunismo y enfrentar la política de mayor explotación de los trabajadores y el pueblo y los recursos naturales del país, que intentarán el imperialismo y la oligarquía con el gobierno entrante.
¡Viva el 47° Aniversario del Partido Comunista Revolucionario del Uruguay, sus mártires heroicos y su persistencia en la lucha revolucionaria!
Entradas relacionadas
Ver todoLa posibilidad de aumentos de tarifas y de impuestos había sido negada enfáticamente por el presidente Luis Lacalle Pou durante la...
En estos días es evidente que ante un nuevo aniversario del Movimiento 26 de Marzo, muchas cosas y conceptos se ponen sobre la mesa en...
En los últimos tiempos han ido surgiendo en forma cada vez más amplia problemas y situaciones cada vez más difíciles de atender, con las...
Commentaires