top of page

Trabajadores del INAU en conflicto: Denuncian hacinamiento y vulneración de derechos en internos en

  • Foto del escritor: La Juventud Diario
    La Juventud Diario
  • 13 nov 2019
  • 5 Min. de lectura

El colectivo de trabajadoras y trabajadores de Casa del Sol – INAU emitió este lunes un comunicado con el objetivo de informar a la opinión pública la situación de emergencia en la que se encuentra el servicio, y dar a conocer las condiciones de vida de los niños y niñas a los que brinda atención diaria.

Casa del Sol es la única Puerta de Ingreso de Montevideo al Sistema de Protección 24 Horas del INAU para la Infancia. Esto significa que al Centro ingresan todos los niños y niñas de entre 6 y 12 años de edad de Montevideo, para los que se ha solicitado a nivel Judicial el amparo de INAU ante situaciones de riesgo de vida, maltrato, abuso, falta de referentes adultos protectores, entre otros, explican los trabajadores. Uno de los principales objetivos del trabajo en Casa del Sol es diagnosticar si existen posibilidades en el corto plazo de trabajar para un reintegro al medio familiar y/o afectivo de los niños y niñas que ingresan al sistema. En función de esos diagnósticos e intervenciones, y siguiendo la línea programática de la desinternación, actualmente Casa del Sol atiende a más de 60 niños y niñas en contexto familiar. Cuando la posibilidad de reintegro es descartada, los niños y niñas residen en Casa del Sol aguardando su derivación a un Centro de Permanencia que dé continuidad a sus proyectos vitales. “Trabajamos desde la convicción de que vivir en familia es un derecho, y la internación ha de ser la última estrategia de intervención para restituir los derechos de los niños y niñas más violentados de la sociedad. No obstante, insiste la necesidad de internar a un importante número de estos niños y niñas, por lo que consideramos prioritario comunicar y transformar las condiciones en las que la internación tiene lugar”, sostienen. Según el colectivo trabajador, “actualmente la situación en Residencia es de hacinamiento y vulneración de derechos básicos: Casa del Sol se encuentra atendiendo a 40 niños y niñas presentes en la casa, con un total de 22 camas. Esto significa que 18 niños y niñas están pernoctando en colecho colectivo: colchones en el piso y sillones, llegando incluso a dormir de a dos en un colchón”. Agregan que los educadores y educadoras que atienden a estos niños y niñas en el cotidiano, suman un total de 20, y cubren los siete días de la semana, las 24 horas en turnos rotativos, siendo los recursos humanos insuficientes para brindar condiciones mínimas de atención a la población. Además una única Auxiliar de Enfermería aborda la atención en salud de los niños y niñas presentes y en contexto familiar. Y no cuentan con Médico Pediatra, Médico Psiquiatra, Psicólogo/a, Maestro/a. Denuncian también que “los recursos materiales y la infraestructura tampoco son suficientes ni adecuados para brindar atención de calidad. Prácticamente todos los espacios de la casa se han vuelto dormitorios. No contamos con vestimenta ni calzado digno para brindar a los niños, no hay stock de juguetes, ni materiales didácticos. No es posible acompañar procesos educativos, ni sostener los espacios recreativos, así como garantizar la atención en salud en el tiempo que es debido”. Por otra parte, afirman que “las situaciones de desborde emocional experimentadas por los niños y niñas son diarias y en ocasiones tienen lugar tres o cuatro veces por día. Hablamos de autolesiones, crisis de autoagresividad y heteroagresividad, crisis de angustia. Las intervenciones de la emergencia móvil y los traslados a emergencias psiquiátricas se han tornado moneda corriente para paliar estas situaciones. Los casos de enuresis y encopresis nocturna y diurna son cada vez más frecuentes”. Subrayan que “si bien sabemos que estos episodios obedecen en gran medida a las historias de vida de los niños y sus posibilidades de expresión, resulta innegable que las condiciones de vida a las que se los somete actualmente no hacen más que agudizarlos. Cabe recordar que estamos hablando de niños y niñas que acaban de ser removidos de su medio familiar -por las causas que fuere-, forzados a convivir con desconocidos, en condiciones de hacinamiento y omisión; por lo que experimentan uno de los momentos más angustiosos y ansiógenos de sus vidas, y el daño que se les está infligiendo es grave”. Los trabajadores se preguntan: “¿Acaso se espera que acontezca una situación grave e irreversible para actuar? En ese caso, ¿Seremos responsabilizados los trabajadores y trabajadoras del Centro por ello?”. Aseguran que la Institución Nacional de Derechos Humanos se encuentra informada de la situación de la Puerta de Ingreso de Infancia desde el mes de enero, y que las autoridades de INAU se encuentran también al tanto de la situación; que la Dirección del Centro mantiene reuniones periódicas con Dirección de Infancia y Protección 24 horas, informando el estado de situación del servicio. Los trabajadores del Centro han mantenido reuniones con autoridades en más de una oportunidad. La última de estas instancias tuvo lugar el día martes 5 de noviembre y contó con la presencia de la Presidenta de INAU, el Vicepresidente, el Director Departamental de Montevideo, la Directora de Protección 24 horas, la Directora de Infancia, el Director de Adolescencia, asesores, representantes de SUINAU y trabajadores de Casa del Sol. “En dicha instancia las autoridades reconocieron la existencia de un estado de colapso generalizado del Sistema de Protección 24 hs. que respondería a un incremento imprevisible de solicitudes de amparo”, afirman. En tal sentido, “se reconoció -por parte de las autoridades- la existencia de al menos 100 situaciones que esperan ingresar al Sistema”. Informan que ante dicho colapso las autoridades plantearon una serie de acciones institucionales para atender la urgencia: “Se planteó la próxima derivación a centros de permanencia de un total de 15 niños y niñas, y la apertura de un Centro gestionado por convenio con la ONG “El Abrojo”, que atendería a otros 15 niños y niñas en residencia”. Los trabajadores y trabajadoras consideran que “la respuesta del Instituto ante la situación de desborde del Sistema no ofrece mínimas garantías para la restitución de derechos de los niños y niñas que atendemos. Asimismo, vemos cómo las acciones tienden hacia la privatización de la atención a la infancia, lineamiento que rechazamos”. Insisten en que se encuentran ante un incremento sostenido de los ingresos al Sistema de Protección y ello se debe a múltiples y complejos factores: “Asistimos a la pauperización de la vida de gran parte de la población que no accede a trabajo formal, vivienda digna, salud de calidad; se han profundizado los fenómenos de marginación social y asistimos a una crisis de las redes sociales y afectivas que otrora brindaban sostén de la infancia”. Entienden que “la situación es grave y requiere de parte del Instituto y sus autoridades un análisis profundo y una evaluación seria de las políticas públicas de infancia y de su articulación con otras esferas estatales responsables de la dignificación de la vida de la población”. Ante esta situación, las trabajadoras y trabajadores de Casa del Sol se declaran EN CONFLICTO, y decidieron en asamblea frenar los ingresos hasta tanto la institución se comprometa a “dar una respuesta sólida y de fondo a la situación de emergencia reconocida”. “Exigimos se concrete la derivación y se garantice la atención digna de los niños y niñas que no cuentan en lo inmediato con posibilidades de reintegrarse a su medio familiar o afectivo”, concluyen.


Entradas relacionadas

Ver todo
49 Aniversario, no hay repliegue

En estos días es evidente que ante un nuevo aniversario del Movimiento 26 de Marzo, muchas cosas y conceptos se ponen sobre la mesa en...

 
 
 

Comments


Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
Noticias destacadas
Noticias recientes
bottom of page