Canelones lucha contra la contaminación Los vecinos de Tapia le dicen ¡NO al megabasurero!

El pasado domingo 14 de julio se realizó un encuentro en la Floresta que reunió a vecinos de distintas zonas, para poner sobre la mesa la lucha para frenar la instalación de un vertedero de residuos en la localidad de Tapia, del cual saldrán 6.000 toneladas de basura diaria. La actividad tuvo lugar en la Liga de Fomento de la Floresta, ubicada en la Av. Treinta y Tres y Mutoni.

La instalación del megabasurero en un principio estaba planificada a realizarse sobre la ruta 8, en el kilómetro 50, inmediato al peaje de Soca. La ubicación fue descartada gracias al movimiento de los vecinos de la zona de Soca, Atlántida, Las Vegas, Parque del Plata y de La Floresta. También fue descartado por la DINAMA, ya que se trataba de un lugar reservado por OSE para una futura toma de agua. La idea de la instalación del megabasurero fue entonces trasladada hacia la localidad de Tapia. Allí el problema es similar al de la locación anterior, una zona inundable por la que atraviesan varias cañadas que terminan desembocando en el arroyo Los Mosquitos, el cual a su vez desemboca en el arroyo Solís Chico, que luego continúa hacia el Río de la Plata. En Tapia la población es escasa, pero todas son pequeñas familias productoras rurales que viven allí apostando al campo como forma de subsistencia. El lugar es hermoso en cuanto a flora y fauna, con lugares por los cuales emana agua desde los cerros. En las disposiciones generales del Reglamento de Evaluación de Impacto Ambiental que se encuentra en el Decreto Nº 359/005 aprobado en 2005, establece que en el caso de la construcción de plantas de tratamientos de disposición final de residuos tóxicos y peligrosos, o en el caso de la construcción de emisarios de líquidos residuales, existen límites en la superficie donde se deben ubicar este tipo de construcciones. Por ejemplo, a una distancia mínima de los cursos de agua potable, de los lugares de toma de agua, de los lugares donde el índice CONEAT es más de 100, que refiere a un estado fértil de las tierras que se utilizan para producir distintos alimentos. La mayoría de la gente de la zona cultiva allí, e incluso hay tierra del Instituto de Colonización cerca, en la cual se encuentran establecidos productores. También hay viviendas de Mevir en las que habitan los propios productores. Estos productores a su vez contaron que todavía tienen un plazo de 19 años para pagar sus casas, lo que los pone en una situación de incertidumbre ante la instalación del megabasurero, ya que por más que se desvalorice su terreno o se le contamine la tierra, tendrán que seguir pagando la casa. Con este panorama, de parte de la Intendencia se ha ignorado el tema de las cañadas, y no se respeta la normativa en la cual se establece que no se pueden instalar este tipo de emprendimientos en territorios próximos a extracción de agua potable. Sucede a su vez que a 4000 metros de la locación hay una escuela rural, la cual tiene agua de pozo y se surten allí a todos los niños de la escuela, que llegan a ser 25, más los productores de la zona en época de sequía. Cecilia Vener, productora rural, hizo hincapié en la reunión de este domingo en cómo los vecinos se enteraron de esta posible instalación, y lo primero que hicieron fue informarse sobre qué era lo que se pretendía hacer. Han tenido distintas instancias en las cuales han recibido a jerarcas tanto de la Intendencia de Canelones, como de la DINAMA. Expresó que desde la Intendencia pretendieron explicar que no será un megabasurero, sino un vertedero, y que los vecinos van a tener formas paliativas de combatir la contaminación en cuanto a lo visual y el olor a partir de la plantación de cortinas de árboles. Se les dijo que la basura va a estar enterrada, no a la vista. Tras esta comunicación, los vecinos de Tapia hicieron una recorrida por otro vertedero que se encuentra en Maldonado, en la localidad de Las Rosas, que está bajo el consorcio integrado por Aborgama, la misma empresa que asumirá el megabasurero en su localidad. Fueron hasta allí, tomaron fotografías, y se encontraron con una realidad distinta a la que le pintaron desde la Intendencia. Observaron montañas de basura que están a la intemperie, sin ningún vallado, sino apenas una red de pesca. Y se encontraron con que los árboles que se han plantado allí en la zona para tratar de que no se vea nada desde el exterior del vertedero están secos, debido a que los alrededores están completamente contaminados, volviendo al terreno inutilizable. El Doctor César Mansina, asesor de los vecinos de Tapia, en el encuentro profundizó en el contrato con la empresa, encontrando varias irregularidades en la licitación, como que la compra de los terrenos está sujeta a la aprobación de la DINAMA -terrenos que están valuados en un millón de dólares. El Dr. Mansina habló acerca de los motivos que lleva a la empresa y a la Intendencia para colocarlo allí, y cómo no tomaron en consideración los cursos de agua que atraviesan el territorio. El Doctor también se encontró con material clasificado, que tenía prohibida su difusión. En el caso de las dos empresas que no ganaron la licitación, aún estaba imposibilitado el acceso al contrato que presentaron. Se están siguiendo distintos mecanismos, los vecinos se han presentado ante los distintos organismos correspondientes para tratar de buscar una solución a esta problemática, ya que no es lo mismo lo que se pretendía en un comienzo, construyendo un basurero de primer nivel mundial en el cual iba a haber reciclado de basura e iba a significar una nueva fuente de trabajo, de lo que se pretende hacer actualmente. Han disminuido los costos que le van a ocasionar a la Intendencia verter diariamente allí todo los días del año más de 6.000 toneladas de basura diaria que viene de todo Canelones para el lugar. Queda en manos de los vecinos fijar los pasos a seguir, desde pedir reuniones con distintos legisladores hasta un posible corte de ruta para hacerse escuchar y manifestarse en contra de la instalación de este megabasurero.