Editorial: Con el FA los privilegiados son los que más tienen

Más allá de las conocidas presiones, extorsiones y amenazas de invasiones militares que sufre Venezuela por parte de EEUU y sus protegidos, es alentadora la noticia que surge desde la cancillería de Noruega, que confirmó el pasado domingo, la continuación del proceso de diálogo entre el Gobierno Bolivariano y la oposición venezolana. La reunión será la semana entrante en la nación caribeña de Barbados. A través de un comunicado el ministerio de Asuntos Exteriores del país escandinavo informó que los representantes de las partes se reunirán esta semana para avanzar en la búsqueda de una solución acordada y constitucional para el país. Las negociaciones se llevarán a cabo de manera continua y expedita. Tras conocerse el comunicado el ministro venezolano de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, celebró “el tenaz talante para el diálogo” demostrado por el presidente Nicolás Maduro y el líder Hugo Chávez. El presidente brasileño Jair Bolsonaro no se privó de presenciar la final entre Perú y Brasil por la Copa América, donde concurrió al estadio acompañado por su ministro de Justicia, el ex juez Sergio Moro, envuelto en un escándalo por la filtración de mensajes que muestran el armado de la causa Lava Jato y la prisión del ex presidente Lula Da Silva. Mientras la popularidad del extrovertido presidente va en baja, la industria no crece, aumenta la desocupación, en 2017 y 2018, la economía creció a un ritmo escaso de 1,1% al año. Y aún hay más malas noticias, desde el comienzo de este año, los economistas han reducido en más de la mitad sus expectativas de crecimiento económico para 2019, a una tasa no muy diferente a la observada en los últimos dos años. La encuesta oficial de desempleo muestra que 28,3 millones de personas están laboralmente subutilizadas, lo que significa que no trabajan, o que trabajan menos de lo que podrían. Hay menos personas con empleos formales, mientras que los salarios apenas están al día con la inflación, que ha sido brutal. Desde el inicio de la recesión hace cuatro años, los precios en Brasil han subido un 25%. La realidad de Argentina es muy parecida a la de Brasil, los gobiernos de los países más grandes y con más poder económico del Mercosur, impulsan a rajatabla acuerdos comerciales con la UE y ahora surgen voces de un acuerdo de libre comercio con EEUU. Los más ricos, las grandes empresas y las multinacionales disfrutan un acuerdo que tardará en concretarse pero nos muestra a dónde nos quieren llevar. Para no ser menos, estos y los anteriores oficialistas discuten por un titulo más o menos pero soslayan hacia dónde irá este país, con hambre, frío, desocupación y gran deuda pública. Ahora aparecen oficialmente los aportes que reciben los alumnos que van a escuelas con administración privada, ahí se demuestra cómo se ha tolerado desde el Poder Ejecutivo que los impuestos vayan a donde los empresarios desean, sin importarles el bien común. En ese sentido el gobierno se silencia, se abre, se paraliza a favor de UPM, y ésta decida invertir, recibiendo facilidades de todo tipo. La industria nacional es ninguneada, las empresas estatales desvalijadas por el desguace y la privatización en contra del pueblo y sus intereses.