Michelle Suárez: Ex senadora condenada a 4 años por delitos de estafa, falsificación y falso testimo

La Justicia de nuestro país condenó el pasado jueves a la ex senadora comunista Michelle Suárez a cumplir dos años de prisión domiciliaria y dos años más de libertad vigilada, luego de llegar a un acuerdo con la Fiscalía. La ex integrante de la Cámara de Senadores en representación del Partido Comunista del Uruguay (PCU-FA), estaba cumpliendo prisión domiciliaria desde el mes de abril del año pasado, por estafa y falsificación de firmas, y llegó a un acuerdo por el que se le bajará el plazo de la condena. Además no podrá ejercer su profesión ni tampoco ocupar un cargo público mientras dura la pena. Suárez es condenada por cinco delitos de falsificación en reiteración, con dos delitos de estafa, uno de falsificación de testimonio y tres delitos de alteración de certificados. La Justicia pudo comprobar que la ex senadora falsificó la firma de sus clientes en dos oportunidades, en una un padre perdió la patria potestad de su hijo y en el otro caso, fue una clienta que se cambió de sexo. A pesar de que la legisladora no puede ejercer como abogada desde mediados del año pasado, ya que la Suprema Corte de Justicia le inhabilitó el cargo, en octubre del año pasado la abogada ofreció sus servicios sin poder hacerlo, según las informaciones manejadas a nivel periodístico. El caso se registró cuando el año pasado a través de un informe de Radio Sarandí, se detallaba que Michelle Suárez seguía ejerciendo su profesión a pesar de estar inhabilitada. El informe señalaba que Suárez ofrecía sus servicios de “abogada y doctora en Ciencias Sociales” a través de un aviso publicado en una revista de avisos clasificados de la Costa de Oro. La dirección y los teléfonos incluidos en el aviso coincidían con los de la ex senadora comunista. El informe incluyó los audios de llamadas de un supuesto cliente, al que Suárez -que se presentó con su segundo nombre Valeria - informaba que cobra 500 pesos por la consulta. En una segunda llamada reconoció ser Michelle Suárez y le aclaraba al cliente que su situación procesal no podía afectar el caso, e indicaba que de lo contrario no podría contar con una cartera de clientes. Ahora la justicia de nuestro país la condenó a cumplir dos años de prisión domiciliaria y dos años de libertad vigilada.