Columna Se puede lo que el pueblo quiere

Escribe: Prof. Andrés Freire

Esta semana no ha sido fácil para mí; largas jornadas de trabajo, reuniones de profesores, responsabilidades con los hijos, con los amigos, y robarle horas al sueño para ir a buscar los consentimientos de algunos compañeros y compañeras de Canelones, conversar con uno, con otro, entender los sí y los no, escribir estas columnas, planificar clases, estudiar, buscar materiales. La verdad he dormido muy poco, pero no importa, son las cosas que uno hace con alegría porque no vive en la miseria del presente, sino en un futuro venturoso de pan, de trabajo, de dignidad para todos. Y si escribo, si participo, si doy mi contribución es porque estoy totalmente convencido que muchos de los hoy no se puede, mañana serán podemos; porque se puede, se puede todo lo que el pueblo quiere, es posible que en nuestro país no exista más un solo uruguayo sin vivienda digna, ni un niño con hambre. Y esto no es voluntarismo ni pensamiento mágico, es simplemente fruto de la historia y la experiencia. Nuestra tarea es entonces trabajar en ese querer, y esa es una lucha esencialmente ideológica. ¿Qué queremos: Un tren para UPM o un sistema ferroviario de transporte de pasajeros? ¿Subsidiar los refrescos de las multinacionales o las bombas de insulina? ¿Invertir en educación y salud o en turf y cerveza? ¿Dar parches y migajas para algunos colectivos muy postergados o encarar soluciones de fondo para todos como el Plan Nacional de Vivienda Popular? ¿Queremos poder ir a la playa en varano o el glifosato y las cianobacterias? ¿Queremos agrotóxicos o la miel pura de las abejas? ¿Queremos cargos de gerentes floreciendo como hongos bajo la lluvia o puestos de trabajo genuinos para todos? ¿Queremos leyes contra la violencia de género con recursos y soluciones reales, o queremos seguir viviendo en el universo de lo que está escrito pero no existe? ¿Queremos seguir viviendo bajo la macroeconomía neoliberal, o estamos dispuestos a tomar una, dos, tres, cuatro, medidas redistributivas de verdad, probando aunque sea una cucharada de vez en cuando de jarabe socialista para esta tos crónica que amenaza consumirnos? En el diálogo sincero con quienes nos rodean podremos ver que son decenas de miles, mucho más que los votos que se necesitan para un senador, los que quieren y anhelan lo mismo que nosotros. Vamos a su encuentro, porque así ha de llegar el día en que caminando juntos llegaremos mucho más lejos que lo posible... Somos Izquierda Somos Patria.