top of page

Terminal especializada en celulosa en el Puerto de Montevideo: Administración Nacional de Puertos t

  • Foto del escritor: La Juventud Diario
    La Juventud Diario
  • 20 ene 2019
  • 7 Min. de lectura

UPM fue la única empresa interesada en construir y además operar una terminal de celulosa en el Puerto de Montevideo. La apertura de las ofertas se realizó en la mañana del 9 de enero.

UPM se presentó con el nombre de la subsidiaria Tebesur SA y depositó una garantía de 4 millones de dólares en el Banco Santander. El proyecto tiene más de 180 hojas. En un comunicado emitido por la empresa, se recuerda “que el Contrato de inversión con el gobierno uruguayo para la construcción de otra planta se firmó en 2017 y como parte de él, el gobierno se comprometió a promover la concesión de una terminal especializada en celulosa en el Puerto de Montevideo con acceso ferroviario para asegurar una salida confiable y competitiva hacia los mercados de exportación”. La terminal portuaria estará dedicada específicamente “a recibir, manejar y almacenar celulosa y otras sustancias químicas incluyendo ácido sulfúrico, soda cáustica, fueloil, piedra caliza y sal”. Al igual que con la infraestructura Vial, la Administración Nacional de Puertos deberá adecuar el Puerto para la llegada de UPM. Esto quiere decir que se deben desalojar o desplazar a quienes ocupen el lugar que UPM necesita. Desaparecerá tal cual están hoy: el Muelle C, el Muelle D, los Diques Flotantes de Tsakos y de la ANP, el Muelle Pesquero de la Pesca Nacional, los Depósitos de Almacenamiento, y los Tanques-Depósitos de gasoil que tiene UTE (ubicados en Baltasar Brum y San Fructuoso), la proa del Montevideo Rowing, etc., etc. Consultamos al Presidente del Sindicato Portuario, quien confirmó que “la ANP deberá construir canales de acceso en el agua para el muelle pesquero, para el dique de Tsakos, hacer fosos, dragar, desplazar, hacer un ingreso a la zona por elevación, hacer otro ingreso para el tren hacia adentro del Puerto… todo eso es a costo de la ANP”, dijo Ricardo Suárez.

De Cayetano

El titular del SUPRA aclaró que -aunque parezca esencial para un proyecto de esta magnitud- “nuestro sindicato no ha tenido ninguna instancia de discusión o de análisis con las autoridades en donde se nos diga claramente qué se va a hacer, o cuáles son las consecuencias”. “Nosotros entendemos que somos sectores involucrados, que somos sectores directamente protagonistas y no hemos tenido espacio. Se le pidió por parte de la intergremial marítima y portuaria al directorio de la ANP, una instancia donde la ANP explique y vea las consecuencias, y hasta ahora estamos esperando respuestas…”, reclamó Suárez.

Con buenos ojos

Respecto al megaproyecto, el dirigente de los portuarios no se pronunció sobre la posible instalación de la pastera: “A nosotros no nos compete discutir si es bienvenida o no una tercer o cuarta planta de celulosa al país, entendemos que ese es un debate nacional, es un debate hacia el país que queremos, y es un debate que se tiene que dar”, afirmó. Sin embargo en lo que al puerto se refiere, Suárez celebró que el proyecto implique que la carga salga por puertos estatales y no privados: “Es el punto en que estamos de acuerdo con el gobierno, que si hay 2 millones -como se dice- de toneladas de celulosa que se van a mover por el país, entendemos que tiene que ser por los puertos estatales y no por puertos privados”. Entonces desde el punto de vista portuario, el de los trabajadores, “es correcto que las cargas se muevan por los puertos estatales”. Suárez lo confrontó con la primer planta de UPM, “que mueve las cargas por un puerto privado, que no está en la órbita y ni siquiera está bajo el control de la administración portuaria. La celulosa de Fray Bentos, va por Nueva Palmira en un puerto privado donde no tenemos acceso, ni siquiera tenemos garantías de que haya un control”, señaló. Si fuera un puerto privado “los costos de dragado, de utilización de las costas, de las aguas, no llegan a la administración portuaria. Hacemos el gasto, invertimos, pero no recibimos ningún beneficio”. Al ser un puerto “bajo el control de la administración”, tienen que aportar y pagar “los cánones al sistema portuario” y que redunde en nuevas inversiones.

Medio siglo

De todas formas “nosotros tenemos criticas en la forma en que se hacen las cosas”, manifestó el presidente del SUPRA. El primer reparo señalado es que la concesión será por 50 años: “Esta es una modalidad que se está utilizando en el sistema portuario muy peligrosa, pero no es la primera; ya el año pasado a la empresa Bomport se le extendió un plazo de 50 años”, lo que consideró “es mucho tiempo en la vida de un sistema portuario y de un país”.

Anotalo a mi cuenta

Continuando con las críticas, “la segunda cuestión es la inversión que tiene que hacer la ANP en función de adecuar los espacios para que esta empresa se instale”. “Parece lógico y acertado que haya una licitación como se hizo para la concesión y explotación de una terminal especializada en celulosa (y que el único oferente ha sido UPM)”, pero es inadmisible “que la ANP tiene que desembolsar de sus arcas un dinero considerable”. “Primero para adecuar los espacios; donde se va a hacer una terminal, hoy funciona un muelle pesquero, funciona el dique de Tsakos, y no se están contabilizando tal vez, los gastos que eso implica a la Administración de modificar la instalación del muelle de Tsakos que se va a trasladar para Capurro. Eso le implica al Estado un movimiento importante, acabamos de enterarnos en forma muy sorpresiva que el Poder Ejecutivo autorizó por decreto -cosa que nos extraña- que se dragara con privados en Capurro. Eso demuestra la imposición de la empresa y cómo todos funcionalmente terminamos trabajando para eso”, evidenció Suárez. Esto naturalmente incluye el espejo de agua, será una terminal especializada en celulosa dentro del Puerto de Montevideo, más precisamente “desde donde están hoy los depósitos de Obrinel hacia el Centro”. Por lo tanto “todo lo que está en el espacio entre el Rowing y Orbinel -la calle Colombi-a, todo eso tiene que ser movido y los costos y los traslados son de la ANP, porque la ANP le va a tener que pagar y le va a tener que acondicionar las obras a Tsakos, y también va a tener que trasladar todo lo que es el muelle pesquero, que se está haciendo un proyecto sobre Capurro que ganó la empresa Saceem”. O sea que hay que hacer canal, hay que hacer foso, “y hay que hacerlo rápidamente”. “Otro costo muy importante que va a terminar pagando la ANP” es para hacer “el acceso elevado, que va a arrancar del Acceso Norte hasta la terminal de AFE; y esos costos se le están cargando a la ANP”. “¿Cómo condicionamos todo a esta respuesta (de UPM)? Es una inversión que va a implicar endeudamientos, que va a implicar gastos”, enfatizó Suárez y reiteró que “el ferrocarril va a llegar hasta la puerta del puerto, pero de ahí para adentro tiene que hacerlo la ANP, y el acceso elevado (que es una gran obra), esos costos que aparentemente uno podría decir deberían ser del Ministerio de Transporte, se le cargan también a la ANP”. “Esto es peligroso -consideró el dirigente portuario-: la ANP tiene una función que es reinvertir, generar infraestructura, generar condiciones… ¿dónde está el retorno?”, se preguntó. “Ese retorno tiene que estar justamente condicionado en algunas cuestiones” que no se están discutiendo.

Zona franca y puerto Libre

Consultado por el régimen de Zona Franca, Suárez sostiene que a diferencia de lo que sería la fábrica “en materia portuaria no es un determinante”: “la planta va a producir en zona franca y va a producir adentro del puerto, por lo tanto perfectamente pueden convivir el sistema puerto libre con puerto zona franca”.

Todos preocupados, nadie responde

Al realizarle consultas por el muelle pesquero, el dique, los depósitos de gasoil de UTE, etc., Suárez demostró inseguridad de su futuro: “lo que pasa es que no hay respuestas”, se quejó. “Uno las busca, pregunta, y son respuestas donde cada uno dice su opinión, pero no vemos una respuesta a los trabajadores y a la comunidad portuaria concreta”. Además señaló que “hay preocupación de los trabajadores de la pesca, que no saben a dónde van a ir, y si donde van a ir tienen las condiciones adecuadas; hay preocupación de los trabajadores del dique; hay preocupación de los trabajadores de la ANP porque esto va a implicar que durante 2 años vamos a estar en obras y va a traer complicaciones; y hay preocupación nuestra desde el punto de vista presupuestal”.

Dualidad frente a trabajadores y multinacional

El titular del SUPRA acusó que la terminal especializada en celulosa se está imponiendo “con cierto atropello” y celeridad, mientras que se votó “una ley que aplicaba reglamentaciones sobre los trabajadores, y se postergó durante 1 año su aplicación, y ahora acaban de votar una nueva postergación”: “no se miden las urgencias con la misma vara, con el mismo criterio”, sentenció. “Vamos a tener una terminal especializada que la va a manejar un operador durante 50 años, y que va a manejar toneladas de celulosa, la pregunta que hacemos los portuarios es: ¿los trabajadores que trabajen ahí van a seguir trabajando en forma zafral, haciendo un jornal sí y un jornal no? Si no se reglamenta eso, es increíble”, manifestó. Para Suárez “lo que hay que discutir es cuál es el modelo portuario que quiere el país en su conjunto”, ya que antes de saber lo que ocurrirá con UPM los escandalosos contratos con los trabajadores se registran en numerosas empresas que operan en los puertos uruguayos. El sistema actual “es un espacio de concesión, de trabajo a largo plazo, en donde pagan, aportan los cánones y las tarifas portuarias, pero se basan en un sistema de mano de obra totalmente precaria e irregular”.

Paz sindical

El SUPRA también se muestra crítico con el manejo de estas condiciones. “Hasta ahora la paz sindical implica en la planta, lo están discutiendo los trabajadores del Sunca mientas dura la construcción; lo están discutiendo los trabajadores de la madera representados en el Soima; pero en materia portuaria nunca fuimos convocados, porque se separa el negocio”. Sin embargo en el caso de los puertos, donde no se trabaja directamente para UPM sino para la empresa con la que se presenta como operador portuario; “¿qué paz sindical puede haber cuando las empresas que están instaladas en el país por 50 años, que hacen millones y millones de inversión, no son capaces de tener trabajadores fijos y garantizarles un salario mensual acorde?”.


Entradas relacionadas

Ver todo
49 Aniversario, no hay repliegue

En estos días es evidente que ante un nuevo aniversario del Movimiento 26 de Marzo, muchas cosas y conceptos se ponen sobre la mesa en...

 
 
 

Comentários


Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
Noticias destacadas
Noticias recientes
bottom of page