Parlamentarias: Campañas sucias gracias a internet.

Si bien el avance tecnológico y las vías de comunicación representan una ampliación del mundo, un acercamiento de lejanías, una posibilidad de información instantánea, pueden ser una trampa con informaciones falsas. Las conexiones posibilitan un seguimiento de cada uno de nosotros, nuestras vidas, nuestros gustos y opiniones, que luego pueden servir para “guiarnos” por el mundo. Aquí en nuestro país, y seguramente por el acercamiento de la época electoral, lo que más importa al respecto es el manejo de posibles votantes. El tema es noticias falsas en redes sociales: campaña sucia a nivel electoral. En el Senado Marcos Otegui presentó hace un tiempo un proyecto de ley. En diputados fue Alfredo Asti quien hizo referencia al tema. “Se tomaron datos personales de la red facebook para utilizarlos en la campaña de Trump creando noticias falsas, así como portales y blogs. Idéntico proceso se vio en México. Lo más peligroso es que este tipo de empresas tienen los perfiles de los usuarios, tienen el conocimiento de sus preferencias, saben en qué trabajan, que socas valores y qué los molestan, que bienes consumen. Cruzan esa información con otras fuentes y trazan los perfiles de los usuarios, luego los agrupan y mandan información falsa para incrementar su descontento o fortalecer un pensamiento aunque no sea verdad. En Brasil la aplicación usada fue whatsapp que por sus características resulta más difícil investigar quien inicia”. “Algunos dirán que no fue la única razón del resultado electoral pero no puede soslayarse su influencia, porque sería irresponsable; erosionan la capacidad de las personas de hacerse una opinión ajustada a la realidad”.