Uruguay: Superpoblación de ratas en las cárceles “es reiterado, no es un hecho aislado”

Denisse Legrand es integrante del colectivo “Nada crece a la sombra” que trabaja en cárceles y dialogó con Radio Centenario sobre la repercusión que tuvo una denuncia realizada a través de su cuenta de twitter mostrando ratas comiendo la comida de los internos del Hogar Sarandí de la Colonia Berro. Del mismo modo, La Juventud consultó a Milton Rodríguez, Educador social y docente Milton Rodríguez, militante del PCR, integrante de la bancada de la Unidad Popular que ha profundizado en estos temas con su práctica laboral y en las áreas programáticas de la UP. Ofrecemos a continuación las reflexiones de ambos militantes, para darle profundidad a las cuestiones de rehabilitación abordadas públicamente por autoridades del INISA, la INDDHH y el sindicato.

Desnisse Legrand

“La superpoblación de roedores en las cárceles es una realidad cotidiana y no un hecho aislado. Llama la atención que como primera respuesta haya sorpresas de parte de la institución, bueno, eso es una realidad que altera la situaciones de la privación de libertad todos los días”. Esta es una situación en el INISA que los trabajadores han vivido continuamente. O sea que además de la salubridad del lugar se afecta hasta la seguridad de los propios menores que están allí. Sí, sí, de nuevo, las ratas forman parte de las cárceles todos los días. Eso altera, por supuesto y pone en jaque la salud de las personas que están privadas de libertad pero también la salud de quienes trabajan ahí. Son muchas personas las que rodean el sistema carcelario, no solamente los trabajadores que están ahí todos los días sino también, por ejemplo, maestras que van a dar clases, personal de salud, organizaciones sociales, las iglesias. O sea, que existan roedores no solamente expone a las personas que están presas sino que expone a toda la gente que está alrededor.

¿Y desde las autoridades lo que se dice qué es, que hay que convivir con ello? ¿O sea, como que el estar en una cárcel hace que tenga que haber ratas? La cuestión es que es un tema que está tan poco en debate porque los que trabajamos en cárceles estamos tan acostumbrados a estar rodeados de ratas, que hay veces que hasta uno quizás ni hace llegar las denuncias y demás. Pero sí tengo entendido que los trabajadores del INISA se han quejado varias veces sobre el tema y que incluso han manejado, por ejemplo, la posibilidad de llevar un gato al espacio de salud o demás. O sea, es una cuestión que se ha pensado cómo sobrevivir a ellos y que no ha habido respuestas.

ustedes como son un colectivo que trabaja en esos lugares, ¿hay algún otro tema que les parezca importante denunciar para que se conozca por parte de la población la situación que se vive en cárceles? Sí, creo que hay que pensar, es bueno que haya salido este tema y que haya surgido la indignación porque esto nos obliga a repensar una realidad que está enterrada que es la realidad de los centros de privación de libertad. Esto de los roedores se suma a un montón de cosas, a malas condiciones para trabajar sin ningún tipo de responsabilidad sobre el delito, a la no coincidencia de programas socioeducativos que puedan trabajar sobre la trayectoria de vida, y ni hablar a cuestiones de alimentación y de salud básicas, de seguridad, de personas privadas de libertad y trabajadores. Hay muchas cuestiones que revisar, y también deberíamos ver cuáles son los objetivos para esta gestión, porque por ahora lo único que vemos para el afuera es la construcción de un complejo carcelario de grandes dimensiones que se va a instalar ahora en la Colonia Berro y que nosotros y otras organizaciones, incluso organismos internacionales creen que los centros de privación de libertad no deben ser de dimensiones grandes. Entonces, ¿por qué estamos tan obstinados en Uruguay con construir Mega Cárceles? ¿Es ese el modelo que queremos, para los próximos 200 años cuando por ejemplo ya cerramos Miguelete que era un centro de privación de libertad y vamos a construir un modelo que tiene exactamente la misma estructura? Son varias las cosas que tenemos que repensar. Y en realidad lo que tenemos que ver acá es que lo que está en juego es la seguridad, porque si no abordamos la realidad carcelaria lo que estamos haciendo es reproduciendo la miseria y la violencia y no cambiando la seguridad del país que es lo que más nos preocupa a uruguayas y uruguayos.

La gente piensa que cuando se encarcela a alguien se soluciona un problema, y en realidad en estas condiciones lo que se está es generando un nuevo problema que se acumula al anterior, no se saca un problema y se pone otro, se acumula, son dos problemas. Nada puede esperarse que salga bien posicionado si las condiciones de las cárceles son estas, de que uno va a comer una comida y no sabe si antes no son las sobras que dejaron las ratas.

Milton Rodríguez

“Una foto no es un cuadro pero, como dicen, un cuadro expresa mucho más que mil palabras”, dijo el educador social en referencia a “la imagen de las ratas sobre la comida de los gurises en el sistema de privación de libertad de adolescentes”. “Nosotros desde Unidad Popular siempre nos hemos opuesto y nos hemos puesto al frente al denunciar un sistema penal adolescente que tiene una impronta fundamentalmente de castigo y de imitar el sistema del mundo adulto”, manifestó Rodríguez, que “privilegia la seguridad, el encierro y los malos tratos por sobre las propuestas socioeducativas”. En ese sentido, aseguró que “los jóvenes en la Colonia Berro como en el sistema de INISA están largas horas encerrados, sin tener espacios abiertos al trabajo y al estudio, a no ser contadas excepciones”. Contraviniendo lo expresado por autoridades de INISA, explicó: “Acá la excepción debería ser la regla; la excepción es cuando hay educadores que como pueden llevan actividades educativas para los adolescentes, se hacen actividades productivas deportivas en espacios de metros, tamaños reducidos porque no se puede salir a un patio, también está el tema de las largas horas sin poder tener contacto con el mundo de la educación o actividades socio-laborales. Cuando estas existen son fundamentalmente por el trabajo de pequeños equipos de educadores, de talleristas que hacen lo imposible para tratar de acercase a los chiquilines”. Milton Rodríguez también cuestionó el “proyecto que INISA está preparando de una Mega Cárcel para adolescentes igual al modelo de adultos”, gastando “millones y millones de pesos en más infraestructura, más murallas, más perimetrales, más cámaras”, mientras que “las ratas son las que comen la comida de los chiquilines”, e insistió en esta postal que evidencia la realidad del sistema de reclusión: “un edificio muy lindo gastando millones muestra a la larga lo que es la relación con el contenido”. “El contenido es una basura, la propuesta, y es algo que no debe existir nunca en un sistema penal adolescente, al contrario; podemos tener edificios más humildes, pero podemos tener quizás mucho más tiempo de sol, de fútbol, de actividades deportivas, de estudio, de lectura”. Rodríguez calificó a la imagen que se difundió esta semana, como “la foto de la desidia, de lo peor que puede existir para un adolescente en ese momento de su vida, y justamente nosotros tenemos que luchar por lo contrario”, concluyó.