Editorial: Masacre de Palestinos por parte de estado israelí debe cesar

Si algo ha hecho el imperialismo y sus aliados en esta época es convertir a Medio Oriente en un polvorín, donde se arman y rearman ejércitos para consolidar la política del despojo sobre el Pueblo Palestino, que en el último siglo hasta nuestros días ha visto perder sus tierras por parte de una terrible alianza que en aras de garantizar su predominio estratégico regional y mundial, ha teñido de sangre durante las últimas décadas con los mejores hijos de Palestina. En los últimos meses la política de expansión por parte de Estados Unidos e Israel, ha llegado a límites difíciles de concebir por el alto grado de irracionalidad que esta tiene, cuando ha trasladado su embajada a Jerusalén, en una acto de enorme desatino, que no ha sido provocado la enorme repulsa de los pueblos de Medio Oriente, y de otras partes del mundo que pretenden la paz para resolver el conflicto pero sobre la base del reconocimiento de la existencia del pueblo y el estado Palestino. Luego que el terrorismo fue derrotado en Siria, y el intento de liquidación de su integridad territorial ha fracasado por parte la estrategia imperial y sionista, la acción de las potencias occidentales se ha centrado, nuevamente en intentar nuevas formas de agresión militar contra el pueblo palestino por la profanación de sus lugares históricos como Jerusalén. El traslado de la embajada norteamericana desde Tel Aviv hacia Jerusalén, se ha convertido en un verdadero acto de guerra para el mundo islámico y especialmente para el pueblo Palestino Tampoco se puede desconocer que en estos días de enorme tensión política en la zona y también internacional por el retiro del gobierno de Trump, del acuerdo de no producción de material nuclear, lo que ha llevado a concretar también sus amenazas contra la República Islámica de Irán, que se ha convertido en estos días en un nuevo foco de controversia y tensión mundial, pues la amenazas de Estados Unidos van contra el tercer productor de hidrocarburos del mundo. La tensión militar en la zona es muy amplia y ello en los últimos tiempos ha estado signada por la pérdida de influencia de los Estados Unidos y sus aliados en la zona, que se ha transformado no solamente en zona de abastecimiento de petróleo y gas para occidente sino que el estancamiento militar de los ejércitos de ocupación de la OTAN están en un verdadero pantano, que no presenta salidas políticas, cosa que no parece interesarle ni a Washington, ni a Israel, en estos momentos. La nueva política de Israel en la zona que provoca, un conflicto abierto contra la destrucción de la población civil palestina en Gaza, debe ser condenada y rechazada por la comunidad internacional y también por nuestro país pues los últimos giros que va adquiriendo esta política son cada vez más peligrosos para todo el mundo. La muerte diaria de cientos de palestinos, miles de heridos y miles de presos en las cárceles debe cesar, y la ONU debería intervenir en la política interior de este país que está cometiendo prácticamente un genocidio contra el Pueblo Palestino, al que le han despojado de sus tierras.