Los compañeros en nuestra memoria
- La Juventud Diario
- 20 dic 2017
- 3 Min. de lectura
GARCÍA LARROSA, Floreal, HERNÁNDEZ de GARCÍA, Mirtha Yolanda; BRUM CORNELIUS, Héctor Daniel; ESTEFANELL GUIDALI, Graciela Marta; CORBO de BRUM, María de los Angeles. Muerte: 20/12/74. Secuestrados en Buenos Aires, asesinados en Uruguay. El 8 de noviembre de 1974, en una serie de operaciones cumplidas por grupos de civiles armados, fueron secuestrados de sus domicilios en Buenos Aires estos cinco refugiados uruguayos, más el hijo del matrimonio García-Hernández, Amaral. El 20 de diciembre sus cadáveres, acribillados, fueron encontrados al borde de un camino, en las inmediaciones de Soca, localidad de Canelones distante unos 40 kilómetros de Montevideo. La fecha y el lugar coincidían con un operativo que 3 años atrás había realizado el MLN-TUPAMAROS, ocupando la ciudad y todos los centros represivos, recuperando armas para el pueblo. Según la información proporcionada por el gobierno uruguayo, su muerte databa de algunas horas. No se proporcionó ninguna explicación respecto a la aparición en territorio uruguayo de estas personas, secuestradas varias semanas antes en Argentina. No se dio cuenta de ninguna investigación realizada. Un informe que publicara el semanario "Las Bases" en 1985, señalaba que "Los cuerpos separados unos de otros por una distancia de aproximadamente diez metros, presentaban heridas con múltiples orificios de entrada y escasas salidas. El hecho conduce a suponer que los disparos fueron realizados "casi a quemarropa", tomando como blanco a mujeres y hombres que tenían los ojos vendados y las manos atadas atrás. Unos vestidos, otros escasos de ropa y algunos completamente desnudos". En tanto la hermana de Floreal refiriéndose a los cuerpos de su hermano y su cuñada, narraba que "Los entregaron en cajones tapados pero nosotros cuando llegamos al velatorio los destapamos. Quiero acotar que cuando encontraron los cuerpos, los encontraron desnudos. Cuando tuve que ir a reconocerlos (a Floreal y Mirtha), estaban vestidos. Floreal tenía cicatrices en la boca como si hubiera sido torturado y se le hubieran cicatrizado muy recientemente. Tenía el cuello y un poco más abajo de los hombros, azul casi violeta". Dos años más tarde cuando los familiares fueron a reducir los cuerpos, el sepulturero preguntó ¿Qué tuvieron estos muchachos, un accidente? a lo que le respondieron que había sido un crimen, que los habían matado a tiros. Nuevamente el trabajador preguntó ¿A tiros? tienen los brazos y las piernas partidas. El niño Amaral fue encontrado varios años después.
Una placita en Los Olivos
A más de 30 años de su desaparición forzada, los vecinos rinden homenaje al amigo: en el cruce de Torricelli y Chapicuí, un rinconcito del barrio se llamará Plaza Gualberto Floreal García.
Se impulsaría la reapertura del caso
Julio Abreu, sobreviviente del secuestro, relata los hechos que vivió y refiere que no tenía nada que ver con los Tupamaros, que era votante del Wilson, que había ido a Buenos Aires a buscar trabajo y que el 8 de noviembre de 1974 su hermano lo invitó a un cumpleaños donde había algunos uruguayos que conocía, incluido Floreal. Que al llegar, le piden que vaya a comprar un pollo porque la comida no alcanzaba, y Floreal se ofreció para acompañarlo y que llegando a la esquina, un comando vestido de civil los secuestró. Prosigue diciendo que una vez en el lugar de detención en cierto momento traen a Brum y a Floreal y que este último “Estaba destrozado”. Tenía quemados los testículos y el pene. No sé dónde no lo habían tocado".
El vuelo cero
Desde Argentina son trasladados a Uruguay y ya en Montevideo, los trasladan a la casa de Punta Gorda, que los servicios utilizaban como centro de tortura clandestino, donde Brum refiere que una voz dura e imperativa dice: 'Bueno, ya los matamos; están todos muertos estos comunistas' y que poniéndole a él una mano en el hombro le dijo: 'Vos quedate tranquilo, a vos no te vamos a matar porque no sos comunista. Nosotros matamos a los comunistas'
Comments