top of page

Treinta y Tres: LA CARTA MAGNA

  • Foto del escritor: La Juventud Diario
    La Juventud Diario
  • 24 jul 2017
  • 3 Min. de lectura

Aníbal Terán Castromán

La Carta Magna (en latín, Magna chartalibertatum: ‘Carta magna de las libertades’) fue un documento aceptado por el rey Juan I de Inglaterra, ante el acoso de los problemas sociales y las graves dificultades en la política exterior. Después de muchas luchas y discusiones entre los nobles de la época, la Carta Magna fue finalmente sancionada por el rey Juan I en Londres el 15 de junio de 1215. Los 63 artículos de los que consta la Carta Magna aseguran los derechos feudales a la aristocracia frente al poder del rey. Ese documento es uno de los antecedentes de los regímenes políticos modernos, en los cuales el poder se ve acotado o limitado por un texto que le marca límites y le asigna obligaciones. La palabra “magna” viene del latín “magnus” que significa “grande” y da origen a otras palabras como “magnitud”, “magnate” y“magnanimidad”. La grandeza del contenido del documento refiere no solo a su extensión sino a su importancia. Lo de “carta” simplemente alude a un escrito, en este caso, destinado a su lectura masiva. Por extensión la expresión “Carta magna” pasó a ser utilizada para denominar al conjunto de normas contenidas en lo que comúnmente se llama la Constitución de la República. La palabra “constitución” viene del latín constitutio, constitutionis, nombre formado a partir del verbo constituere (establecer, colocar, organizar, construir). Este verbo se forma con el prefijo con- (conjuntamente, idea de conjunto) y el verbo statuere (colocar, situar, disponer, erigir). Es muy interesante esa idea de construcción colectiva, esencial para que su contenido sea aceptado por todos ya que es obra de todos. Podemos decir entonces que ese libro que contiene las bases del sistema de gobierno que adopta un país, tiene una importancia superlativa, por lo que su contenido debería ser bien conocido por todos los ciudadanos. Lamentablemente no es así. Pocas personas tienen un ejemplar de la Constitución en su poder y menos aún dedican algún tiempo a leerla. Se da por descontado que todos sabemos lo que dice, lo que es un supuesto que viene muy bien a los funcionarios de gobierno que deben (deberían) respetar los límites que la Constitución les marca. Una de las formas de desalentar su lectura es hacer creer al común de la gente que su contenido solo puede ser interpretado por expertos. Entre los doctores en derecho incluso, hay quienes son reconocidos Constitucionalistas y ante las dudas, se suele consultar a éstos para asesoramiento. Es verdad que la redacción de este tipo de documentos a veces permite diversas interpretaciones, pero eso es lo que sucede con casi todo lo que se escribe y se dice. El pueblo en general no haría bien en despreciar el asesoramiento de los expertos, pero tampoco debería dejar exclusivamente en sus manos el manejo de algo tan abarcador y determinante. La Constitución no solo debería conocerla el pueblo y no solo los especialistas, sino redactarse colectivamente y en el lenguaje más claro y preciso. Nuestra calidad de vida depende de que se cumpla lo que marca la Constitución… ¡Vaya si será importante conocerla! El Partido Humanista propone una jornada de reflexión respecto a este tema. Los esperamos el martes 1 de agosto a la hora 18:00 en La casa de la Cultura de Treinta y Tres. Cada uno de los participantes recibirá como obsequio una copia de la Constitución de la Repúblicay tendrá la oportunidad de expresarse libremente para hacer sus aportes a esta reflexión. Están todos invitados.


Entradas relacionadas

Ver todo
49 Aniversario, no hay repliegue

En estos días es evidente que ante un nuevo aniversario del Movimiento 26 de Marzo, muchas cosas y conceptos se ponen sobre la mesa en...

 
 
 

Comentarios


Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
Noticias destacadas
Noticias recientes
bottom of page