Condenados al modelo neoliberal- Solución para cincuentones: un parche que mantiene vivo el lucro e
- La Juventud Diario
- 11 jul 2017
- 4 Min. de lectura

La reforma del año 1996 que implicó la privatización de la Seguridad Social en nuestro país, dando lugar a las Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional (Afap), se agregó al histórico régimen jubilatorio solidario e intergeneracional centralizado en el Banco de Previsión Social (Bps), y generó un mecanismo de aportes mixtos para los trabajadores activos que se encontraban hasta ese momento aportando al Bps y quisieran pasarse a las Afap. Cincuentones son un segmento de la población que aportó al sistema mixto (parte de sus aportes a las Afap y parte al Bps) y que próximos a jubilarse, advierten que recibirán montos de pasividad muy inferiores que si hubieran mantenido la totalidad de sus aportes al régimen solidario e intergeneracional, al Bps.
Esta administración neoliberal de los ahorros de los trabajadores, permite que bancos estatales y privados reciban todos los meses por medio de una ley parte del salario de los trabajadores, habilitados a realizar operaciones e inversiones financieras para generar ganancias, pero siendo los ahorros de los trabajadores quienes asuman los riesgos ante eventuales pérdidas de estos negocios; además de privatizar las ganancias y socializar las pérdidas, también socializa los gastos y los costos, pues sigue recayendo en el Bps todo el resto de las prestaciones de la seguridad social, desde las pensiones y prestaciones médicas, hasta los seguros de desempleo. Como contrapartida, la ley permite que estos ahorros de los trabajadores sean usados en inversiones forestales o distintas modalidades de emisión de deuda pública, abonando y sosteniendo así también el modelo neoliberal más allá de la seguridad social. Evidentemente el régimen de Afap no solo es contrapuesto a uno solidario, sino que lo combate. Por eso ante las inequidades e injusticias que genera por excelencia el modelo neoliberal, pueden ser o bien emparchadas para minimizar los aspectos más groseros del impacto social de esta política, o utilizadas como catapulta para atacar el propio corazón del sistema en cuestión. Así entonces están planteadas al día de hoy 2 formas de atacar el problema de los “cincuentones” que exigen una respuesta: la propuesta del gobierno, del Dr. Vázquez, del Cr. Astori, de Murro, del director del Bps Ramón Ruiz y el PitCnt -más allá de matices-, que es la propuesta del sistema, que emparcha para sostener en definitiva las Afap; y la que levanta el Diputado de Unidad Popular Eduardo Rubio impulsada desde el plano social por la Cojupe (Csgu), que soluciona este problema puntual en la dirección de la eliminación total del lucro en la seguridad social, levantando y fortaleciendo el régimen intergeneracional y solidario de jubilaciones y pensiones.
La solución a los cincuentones
La solución que sostiene la bancada de Unidad Popular, implica jubilar a todos los trabajadores que fueron acogidos al sistema mixto en su momento bajo el sistema solidario brindado a través del Bps, transfiriéndose la totalidad de sus aportes desde las Afap hacia el Banco de Previsión Social. Esto como una situación inmediata, y como precedente para abarcar oportunamente la derogación de las Afap, transfiriendo finalmente todos los fondos generados por los trabajadores al Bps, quien volverá a hacerse cargo de todas las pasividades enmarcadas en el régimen solidario e intergeneracional.
El parche que sostiene las Afap
2 semanas atrás el presidente Vázquez anunciaba públicamente en Torre Ejecutiva que daría solución al reclamo de los cincuentones, quienes podrían optar libremente entre mantener la opción jubilatoria que tienen, o pasarse al régimen del Bps, para lo cual previamente recibirían asesoramiento del Banco de Previsión Social. La propuesta sería elaborada como proyecto de ley por los ministros de Economía y de Trabajo, previendo el anuncio de concreción en el Consejo de Ministros realizado a comienzos de esta semana. El lunes en la localidad de Ramón Trigo -departamento de Cerro Largo-, en declaraciones de prensa en el marco del Consejo de Ministros, el presidente Tabaré Vázquez aseguró que “Se ha avanzado enormemente”. “Queda un solo punto, que vamos a discutir en el día de mañana (martes) con el Ministro de Economía y el Ministro de Trabajo y Seguridad Social, y ya está pronto para ir al Parlamento”, explicó el presidente. “Una vez que tengamos el tema liquidado lo vamos a informar”, dijo el Dr. Vázquez y dejó claro que únicamente lo que se busca “en principio era contemplar la situación de los cincuentones que están al borde de la jubilación”. De esta manera se evidencia que esta “solución”, lo único que hará es atender el reclamo de un grupo particular de trabajadores que se perjudicaron notoriamente aun más que cualquier otro, por no haberse previsto correctamente la implementación de la transición de un régimen solidario a uno privatizador. “Hay que ver cuánta gente realmente pasa de la Afap al Bps. Porque cuando se le informe a cada uno individualmente las condiciones que va a tener manteniéndose en la Afap o yendo al Bps, cada uno decidirá. Y de repente pasan 1.000, 2.000, 3.000, o de repente pasan 100 ó 200. Eso va a decidir cada uno de manera individual, a medida que estén informados cuál es su situación”. No es entonces una solución mediante el régimen solidario, sino pasarle el “clavo” al Bps. Se socializan así los problemas, pero la conveniencia individual sigue primando. Cuando se impuso el pasaje a las Afap, fue obligatorio para los trabajadores. Eran las propias empresas financieras quienes “asesoraban” a los trabajadores, o mejor dicho promocionaban sus productos. Hoy día, una solución que quitaría recursos a las Afap y los devolvería al Bps, se hace plantea de forma opcional. La propia lógica de esta “solución”, al igual que el propio régimen de Afap, es contraria al principio de solidaridad intergeneracional en la seguridad social. La propuesta del gobierno, de sus ministros, de los representantes del sindicalismo oficialista, es la propuesta del sistema, la de sostener el modelo neoliberal también en las jubilaciones, es un parche que permite mantener el lucro en la seguridad social.
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