Canciller de Paraguay renuncia por un acuerdo secreto con Brasil

El canciller paraguayo, Luis Alberto Castiglioni, renunció a su cargo tras el escándalo de un pacto secreto con Brasil para el suministro de energía eléctrica.

“Por ética y responsabilidad política, he puesto mi cargo a disposición del Presidente Mario Abdo Benítez. Lamento que la tergiversación haya llevado a este estado de crispación. Todo lo actuado fue transparente y para beneficio del país”, ha expresado este lunes Castiglioni a través de su cuenta de Twitter.

Junto con el ministro de Exteriores también renunciaron tres autoridades paraguayas: el embajador en Brasil, Hugo Saguier; el flamante titular de la estatal de electricidad ANDE (Administración Nacional de Electricidad), Alcides Jiménez, y el director de la binacional Itaipú, José Alderete.

Castiglioni había anunciado horas antes que Paraguay pediría a Brasil suspender los efectos del acta, que establecía un cronograma para la compra de energía a la hidroeléctrica binacional Itaipú hasta el 2022 y fue interpretado por la oposición como una cesión de soberanía.

Según los opositores, el documento elevaría en más de 200 millones de dólares los costos del ente estatal.

El Congreso emplazó al Gobierno a presentar toda la documentación relativa al acta el lunes y convocó a las autoridades para que den explicaciones. Funcionarios de ANDE se manifestaron frente a la sede legislativa con carteles que decían: “no tendrán paz mientras violen la Constitución”.

La crisis se desató tras la renuncia la semana pasada del presidente de la ANDE, un cercano colaborador del presidente Abdo Benítez que se negó a firmar el documento porque elevaría en más de 200 millones de dólares los costos del ente estatal.

El Gobierno de Abdo, quien mantiene una estrecha relación con el mandatario de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que la decisión se tomó finalmente en instancias diplomáticas tras el fracaso de las negociaciones entre los técnicos de las estatales de electricidad.

Paraguay y Brasil son socios en Itaipú, la mayor central del mundo en generación de energía, y se preparan para negociar el futuro de la entidad en vistas al vencimiento de un anexo clave de su tratado fundacional en el 2023.