Polémica instalada que trasciende lo carnavalero
- La Juventud Diario
- 18 feb 2017
- 2 Min. de lectura

Un pedacito de cuplé desató la polémica sobre si el humor debe tener límites en carnaval. Esto suena a un “alerta rojo”. ¿Desde cuándo el carnaval tiene o debe tener límites? El único límite posible es la creatividad del letrista, el no aplauso del público. El resto no cuenta si pensamos en el carnaval del pueblo, en un “relato” de los sucesos del año, en cómo vivió y vio la gente del pueblo esa historia reciente.
No vamos a hacer un compendio de que es carnaval, pero no se discute que es sátira, desenfreno, políticamente “incorrecto”, y que la ética es la cultura popular. El hecho que las “clases altas” se acerquen a esta fiesta es historia reciente, probablemente a partir que los espectáculos se han convertido en eso: grandes obras inéditas de elevado nivel creativo, técnico, artístico. Lejos estamos de las murgas en los tablados cantando con la boca de costado. Es un proceso de años que viene transformando la fiesta.
Pintarse la cara y disfrazarse era para que la gente no te reconociera..dicen viejos murguistas, porque “no se veía bien que fueras carnavalero” . Lejano ese concepto… por el 1900 y pico. Luego se le canta al obrero y al estudiante, acercando nueva gente a los escenarios, integrando conceptos teatrales en el espectáculo, letras refinadas, cantos con arreglos corales y hasta puesta en escena. Por allá en 1970. Aparecen “intelectuales” en carnaval, aparecen jóvenes con otras visiones del carnaval. Pero sobre todo, aquel espacio de crítica y reflexión popular se encuentra con un “obstáculo” de índole político partidario: el gobierno, centro de todos los palos..es de “izquierda”!
Una larga luna de miel lleva a espectáculos globalizados, cantando a la vida, a la sociedad en general, se van los cupleteros, los popurrí y el salpicón. Lejos está decir si esas letras son buenas o malas; son otros contenidos aggiornados a la realidad del país. En cierto sentido representativos de lo que se vive, del período histórico que se transita.
El carnaval declarado de interés por el gobierno… hecho histórico. La tecnología avanzando y permitiendo otros rumbos musicales, de arreglos corales, de luces. El carnaval “descubierto” por muchos teatreros como el lugar donde te ve más gente., donde tu creatividad llega a un público impresionante. El acercamiento de nuevos espectadores a los escenarios…muchos ya no son tablados sino verdaderos “teatros”, con mesas , sillas, plaza de comida.
Hoy se nota que la luna de miel ha terminado y hay una mixtura entre los viejos carnavaleros y los jóvenes, las viejas propuestas y las nuevas. Y hay otro público, abonos en el Teatro de Verano por más de $10.000, platea baja a $440, un escenario comercial según el día de la semana, $240..nos quedan los populares a $60.
La ética es la del pueblo… por ahora…. No quisiera pensar que van a aparecer decretos y cambios de reglamento limitando al carnaval.
Comentarios